Al menos uno de cada 15.000 pacientes que pasa por el quirófano en Estados Unidos sale con una esponja, un bisturí o cualquier otro objeto quirúrgico

Al menos uno de cada 15.000 pacientes que pasa por el quirófano en Estados Unidos sale con una esponja, un bisturí o cualquier otro objeto quirúrgico escondido en alguna parte de su cuerpo, según un estudio publicado ayer en la revista 'The New England Journal of Medicine'. La cifra ha satisfecho a los hospitales, que lo consideran como un error que ocurre «raramente», al afectar «sólo» a 1.500 personas al año.

Sin embargo, el equipo médico de la Facultad de Salud Pública de Harvard y del Hospital de Mujeres Brigham, ambos en Bostón (Massachussetts), dice haber encontrado «un buen número de coincidencias que lo hacen prevenible». Por ejemplo, nueve de cada diez casos se producen en operaciones de emergencia o en intervenciones en las que se presenta alguna complicación imprevista que obliga a traer instrumental adicional al quirófano. Las reglas hospitalarias obligan a que dos personas diferentes cuenten los instrumentos antes y después de la operación. En el 88% de los casos encontrados, el personal médico había anotado el resultado de esa cuenta en el informe, pero, obviamente, la cuenta no era correcta.

El riesgo aumenta en un 10%por cada punto adicional de masa corporal, lo que coloca a las personas obesas en la franja más peligrosas. Los expertos explican que en esos casos no sólo hay más espacio para que pasen desapercibidos los objetos quirúrgicos, sino que se ocultan tras la grasa. «En una persona delgada te basta con mirar alrededor para ver si te has dejado algo», explicó el doctor Atul Gawande, que ha participado en el estudio.

Esponjas

Los hospitales no están obligados a reportar estos casos, pero los investigadores han recurrido a los archivos de los seguros médicos. Según éstos, el 69% de los objetos dejados atrás en el interior de los cuerpos eran esponjas del grosor de una servilleta de papel y el 31%, intrumentos quirúrgicos. Más de la mitad quedaron retenidos en el abdomen y casi un cuarto en la vagina.